Conducir es una acción que para algunos se presenta como placentera, pero, para otros conductores se convierte en una obligación. Sin embargo, ya sea que se pertenezca al primer grupo o al segundo, lo que está claro es que hay situaciones que estresan por igual a unos y a otros. El tráfico en la ciudad suele sacar de quicio a cualquiera, pero no hay que dejarse llevar y seguir siendo en todo momento un buen piloto.
Estos son los 10 mandamientos que deben seguir para pertenecer al rango de los buenos conductores.
1. Nunca coger un vehículo sin seguro
Este mandamiento es extensible tanto a la circulación por ciudad como por carretera. Se trata de una irresponsabilidad y un delito. El motivo no es otro de que si le ocurre algo al vehículo se estará completamente desprotegido, además la responsabilidad civil es obligatoria por los destrozos que se le puedan ocasionar a terceros.
Contratar una póliza es algo realmente sencillo hoy día y que no llevará mucho tiempo, pues puede tramitarse online y, de este modo, conducir siempre tranquilo. Hay muchos tipos, por lo que cada cual puede encontrar la que le resulte más adecuada y se ajuste más a sus intereses y necesidades.
2. Mantener en orden la documentación
Siempre hay que llevar encima ciertos documentos que pueden ser requeridos por los cuerpos de seguridad vial en cualquier control rutinario. Como norma general, no te olvides de llevar la licencia de conducir y la tarjeta de circulación, en vigor, claro está, pues es de carácter obligatorio. No llevar estos papeles es motivo de sanción.
3. Respeta las normas
Seguir el Reglamento de Tránsito es una esencial no solo para evitar multas, sino para no desatar el caos en la circulación por la ciudad. Cabe recordar de vez en cuando que un semáforo en ámbar no es motivo para dar un acelerón, sino todo lo contrario, o que dar la vuelta cuando hay línea continua en la calzada no está permitido. Asimismo, la señal de stop obliga a pararse, no a disminuir la velocidad como es el caso de la señal de ceda el paso.
4. Asegurarse de conocer todas las señales
Al igual que hay señales de tráfico muy habituales que se reconocen con facilidad, hay otras que apenas aparecen cuando se circulan y que, en caso de encontrarlas, no se saben interpretar. Conocer el significado de todas ellas es esencial para evitar accidentes.
5. Conducir a una velocidad moderada
Los límites de velocidad no son un capricho ni se han elegido al azar, han sido estudiados cuidadosamente para encontrar el equilibrio en la ciudad o fuera de ella, para lograr una circulación fluida y segura. Sin importar que las calzadas estén vacías, nunca sobrepases la velocidad que indican las señales, es mejor llegar tarde al trabajo, que no llegar.
6. Tener siempre presentes los elementos del entorno
Ir despistado al volante puede jugar malas pasadas. No importa que se haga el mismo recorrido a diario, de hecho, esos son los trayectos más peligrosos, pues la mente suele ensimismarse y volar a otros lugares, sin estar pendientes de lo que realmente está ocurriendo alrededor de la conducción.
Hay que prestar atención a cualquier elemento, como los postes, señalizaciones provisionales por obras… que pueden pillar desprevenidos y provocar accidentes.
7. Utilizar las luces intermitentes
Es también necesario tener muy en cuenta que no se va solo en la carretera, por lo tanto, cada movimiento que se haga debe estar señalizado correctamente con las luces intermitentes. No marcar los cambios de dirección es motivo de sanción y causa de numerosos choques.
8. No se permiten distracciones
Al volante cualquier distracción se paga muy caro. Queda terminante prohibido llevar a cabo cualquier acción que ponga en peligro tu seguridad, la de los pasajeros del vehículo o la de cualquier otro usuario de la calzada. En este sentido, no se puede hablar por el móvil, mucho menos enviar mensajes. Tampoco se puede comer o beber mientras se conduce o cualquier otra acción que haga que se pierda de vista, aunque sea momentáneamente, de la carretera o del resto del tráfico.
9. Mantener la distancia de seguridad
Mantener la distancia de seguridad es vital para tener el tiempo suficiente de reacción ante cualquier imprevisto. No hacerlo es uno de los motivos principales de choques en las ciudades.
10. Conservar siempre la actitud correcta
Por último, pero no por es menos importante, es esencial poseer una actitud positiva al volante. Es muy habitual frustrarse, molestarse e incluso confrontarse con otros conductores o peatones que mantienen una mala actitud, sin embargo, lo mejor es mantener la calma y no permitir que el estrés se apodere de ti.